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EL MINISTERIO DE ENSEÑANZA DE JESÚS

Por Charles Hegwood

Si tuvieras que poner toda la enseñanza de Jesús en una sola frase, ¿cuál sería? La respuesta de los escritores de los Evangelios a esta pregunta quizá te sorprenda. Si escuchas hoy muchos sermones modernos, probablemente pienses que Jesús era un maestro de ética o puedas sentirte tentado a pensar que Jesús era un maestro de amor. Probablemente, consideres a Jesús como un predicador apasionado que condenaba a los pecadores y predicaba arrepentimiento. Aunque Jesús enseñó sobre todos estos temas y más, individualmente no definen Su ministerio de enseñanza. Los escritores de los Evangelios redujeron todas las enseñanzas de Jesús a una declaración que dice algo así: «El Reino de Dios ya viene, por lo tanto, debemos arrepentirnos». Vemos esta declaración principalmente en Mateo, Marcos y Lucas. Entonces, consideremos estas dos preguntas: ¿estamos enseñando como Jesús? Y, ¿estamos viviendo de modo que reflejemos las enseñanzas de Jesús? Ciertamente, Jesús enseñó sobre todos los temas ya mencionados. El Reino venidero actúa como un lente o filtro para que entendamos la enseñanza de Jesús sobre la moralidad, el amor y el arrepentimiento hacia Dios.

Resumen de Su enseñanza

Mateo, Marcos y Lucas contienen una declaración resumida de lo que Jesús enseñó. Jesús enseñó buenas noticias sobre el Reino y que, como pecadores, necesitamos arrepentirnos o alejarnos del pecado y correr hacia Dios. Gran parte del Sermón del Monte de Jesús y otras enseñanzas semejantes son sobre cómo debemos arrepentirnos y vivir como ciudadanos del Reino de Dios. Esta síntesis también nos insta a responder al mensaje de Jesús y a anunciarlo. «El reino […] se ha acercado» significa que el tiempo es corto. Incluso por la forma en que enseñó Jesús en la Tierra, estaba preparando a Sus seguidores para el día de Su regreso cuando traería el Reino de manera grande y definitiva.

Los escritores de los Evangelios decían que Jesús estaba enseñando «las buenas nuevas» del Reino. El Reino venidero de Dios es una buena noticia porque Él estaba preparando el camino para que Su pueblo habitara con Dios para siempre. El arrepentimiento es nuestra respuesta a estas buenas noticias. Jesús enseñaba para preparar a la gente para la vida en el Reino. A continuación, veamos algunas de las partes más específicas del mensaje de Jesús. 

Enseñanza moral

Jesús enseñó muchas lecciones con temas de moralidad. Sin embargo, Sus enseñanzas sobre moralidad no eran por la moralidad en sí. Esto podría parecernos extraño, pero recuerda que las enseñanzas de Jesús tenían un propósito. Estaba preparando a la gente para la vida en el Reino. Considera el Sermón del Monte: contiene mucho de lo que podrías llamar enseñanzas morales. Pero el propósito de las palabras de Jesús era llamar a Sus seguidores a vivir una vida que reflejara la vida en el Reino. Jesús le enseñó a la gente cómo vivir una vida que trajera gloria y adoración a Dios. Implícito en la enseñanza moral de Jesús estaba el llamado a arrepentirnos porque no vivimos a la altura de Su estándar perfecto. Las buenas noticias son que donde fallamos, Jesús ha triunfado. Podemos vivir conforme a las palabras de Jesús sabiendo que cuando fallamos somos perdonados y que el Espíritu Santo está haciendo una obra en nosotros para ayudarnos a crecer en madurez y santidad en Cristo. Entonces, ¿qué dice tu forma de vivir acerca del amor de Dios? 

Enseñanza sobre el amor 

Jesús enseñó mucho sobre el amor. Le enseñó a la gente a amar a Dios sobre todas las cosas. Si amamos a Dios sobre todas las cosas, también amaremos a la gente. Sin embargo, Jesús no enseñó sobre el amor por el amor en sí. Él tenía un propósito para Su enseñanza. Estaba enseñándole a la gente a amar a Dios y unos a los otros a la luz del Reino. Si tomas todos los mensajes que Jesús enseñó sobre el amor y los pones juntos podrías decir que Jesús estaba diciendo: «Amas a Dios por cómo amas a los demás». Un seguidor de Jesús arrepentido no puede amar a Dios y odiar a los demás. Debemos amar a nuestro prójimo y también a nuestro enemigo. Esta es una enseñanza contracultural sobre el amor. Jesús quiere que amemos con un amor que refleje a Dios. Este es un amor que vence el pecado y nuestros fracasos. Jesús quería que amemos a los demás porque así es el amor en el Reino. ¿Qué dice tu manera de amar a las personas acerca de tu amor por Dios? 

Enseñanza sobre el arrepentimiento 

Uno de los temas principales del mensaje de Jesús era el arrepentimiento. No podemos eludir esta palabra. Todas las partes de la enseñanza de Jesús deben ser tomadas en conjunto. Numerosas veces en los Evangelios vemos a Jesús predicando un mensaje de arrepentimiento: «Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado». Nos arrepentimos porque hay un propósito para el arrepentimiento. El Reino de Dios viene. Ya no podemos seguir viviendo nuestra vida de pecado. Vivimos una vida arrepentida y enseñamos sobre el arrepentimiento en nuestras iglesias. Este mensaje ha dejado de ser popular entre la audiencia moderna. Espero que, al considerar las enseñanzas de Jesús en nuestra vida, no rehuyamos el llamado al arrepentimiento.

Entonces, podríamos decir que Jesús era un predicador apasionado con un mensaje de arrepentimiento. Pero a diferencia de muchos de los ejemplos que llenan tu cabeza ahora mismo, Jesús respaldó Su mensaje con una vida moral y amorosa. Si bien deberíamos enseñar arrepentimiento y llamar a los pecadores a arrepentirse, debemos ser ejemplo de esa vida para el mundo. Nuestra vida y mensaje deberían ser un reflejo de Jesús. ¿Cómo te arrepientes y enseñas arrepentimiento reflejando el amor por Dios?

Conclusión

Esta es solo la punta del iceberg en el tema del ministerio de enseñanza de Jesús. Se han escrito libros sobre el tema. Mi propósito aquí es remarcar tres partes de la enseñanza de Jesús que deberíamos tomar en consideración a la hora de vivir y enseñar. Vivamos una vida moral, amorosa y llena de arrepentimiento. Que lo que enseñemos sea un reflejo de cómo vivimos. Deja que tu ministerio de enseñanza sea un reflejo de la enseñanza de Jesús. No solo enseñes las partes cómodas. Enséñales a otros creyentes cómo vivir la vida a la luz del Reino venidero de Dios. Entonces, ¿qué es lo que dicen tu vida y enseñanza sobre tu amor a Dios y Su Reino?  


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